Diablos de Yare para el mundo

Por Carlos Morgado

La Festividad del Corpus Christi es popularmente conocida en Venezuela a través del ritual mágico-religioso de los Diablos Danzantes de Yare, cuyo origen se remonta al siglo XVIII. La fraternidad de Diablos de este pequeño pueblo colonial es la más vieja del continente americano, y tal vez la más organizada.

El vestuario en los años 50 y 60, el traje era de Dril o Kaki, algunas telas de estampas floreadas y adornos a sus alrededores con motas elaboradas de pabilo de colores. Pero en lo general eran sin color desde la ropa kaki hasta las mascaras sin una pizca de pintura. En tal sentido, al transcurrir del tiempo y ya por los años 61- empiezan a pintarse la ropa con una marca de pintura de olor muy fuerte denominada sapolin, lo que producía un efecto visual tanto a los habitantes como a turistas de carácter grotesco e impresionante.

Por otra parte, el vestuario tuvo una transformación a partir del año 1948, los Diablos de Yare son invitados por el entonces Ministro de Educación Luis Beltrán Prieto Figueroa a participar en un Festival Folklórico en Caracas con motivo de la toma de posesión del Presidente de la República Rómulo Gallegos. Según palabras de algunos promeseros entre ellos  Amador Díaz, al salir del Nuevo Circo de Caracas la policía trato de impedir su paso por desconocimiento y por lo raro como estaban vestidas estas personas; y en ese momento tuvo que intervenir personas que conocían de la manifestación y fue uno de ellos el conocido escritor Juan Liscano quien dijo ¡Esos son los Diablos de Yare! Y así fue como se dieron a conocer con ese nombre. De tal manera, les entrega a partir de ese momento dos metros de tela roja a cada diablo para que cambiaran su traje. En tal sentido fueron muy pocos los que hicieron caso ya que no compartían esa decisión del Ministro Prieto Figueroa.

Paso mucho tiempo para que la mayoría  estuviera de acuerdo y cambiarse el trajo de kaki o Dril por el rojo. Entre tantas faenas que realizan, resulta emocionante verlos danzar al son del repique de un tambor típico o redoblante. Por otra parte, las calles del pueblo San Francisco de Yare son el escenario para su máxima expresión al danzar, que culminan al postrarse de rodillas  frente al Santísimo Sacramento en señal de respeto mientras el sacerdote los bendice.

La música y el baile continúan mientras pagan sus promesas religiosas bajo el atuendo de sus rojas vestimentas y coloridas mascaras, luego visitan los Diablos difuntos donde le rezan en la puerta del cementerio de Yare durante  una hora, para regresar de nuevo al templo dando varias vueltas alrededor de la plaza Bolívar de Yare.

Esta Festividad Folklórica que comienza a partir del primer jueves contando nueves jueves después  de semana santa, rindiéndole  homenaje al Santísimo Sacramento del Altar  en la Víspera del Corpus Christi, el día miércoles con un velorio,  en la cruz verde del Calvario y otro en el sector el Arbolito de Yare, con cantos de fulias,  recitales, decimas, y rezan rosarios y salves hasta el amanecer. 

Al despejarse y llegar el día jueves del Corpus Christi a partir de las diez de la mañana comienza la diablada a reunirse frente de la Iglesia con el llamado al toque del tambor realizado por Cesar Tovar quien desde muy joven y hasta los momentos no ha habido quien pueda igualarlo, superar o remplazarlo en su estilo al tocar el tambor. Es allí donde comienzan a danzar alrededor de la plaza Bolívar ubicándose luego de rodillas ante el viejo templo de Arte Barroco fundado en el 1718 donde en un acto simbólico mágico religiosa y pagana, el sacerdote u obispo inician algunas preguntas al actual capataz  como cuántos diablos existen inscritos y quiénes por primera vez recibirán el acto sacramental. 

Desde tiempos de la Colonia las mascaras son elementos de fusión social, de actos de protesta ante el maltrato por la esclavitud, de fe, religiosidad, creencias en fortalecer al cuerpo ante las enfermedades, curar sus penas son representaciones teatrales donde se hace una apropiación mágica. 

Según el catalogo de Patrimonio Cultural de Venezuela 2004-2006, nos dice que las máscaras de Diablos de Yare, están conformada por una horma de barro, papel de bolsas, harina de trigo o almidón, pabilo y goma espuma en su parte interior para el soporte suavizando el peso y la comodidad del promesero. Por otra parte, se dice que el Primer Capataz usa cuatro cachos que a su vez simbolizan las cuatro Estaciones del año y los cuatro puntos Cardinales. De allí que, el segundo Capataz usa tres cuernos que significan los tres Reinos: el Reino  Animal, Reino Vegetal y Reino Mineral. El tercer Capataz o Arreador impone respeto y la disciplina, lleva una máscara de tres cuernos.

Entre otras cosas, este pasado jueves 6 de diciembre  después de tanta lucha para que fueran reconocidos Los Diablos de Yare se decretó  ante la UNESCO en París aceptadas las 11 Cofradías de Diablos de Venezuela y en especial Nuestros Diablos Danzantes de Yare como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad con su Presidente al frente el amigo Ernesto Herrera. En este sentido San Francisco de Yare, se viste de triunfo y alegría por tan notable exaltación recibida.